Causa probable: Evaporación del aceite utilizado en el proceso de fabricación de los ductos de la chimenea.


Solución: Airear el área esperando que el aceite se queme por completo. Para suavizarlo, puede reducir el poder del calentador (en el caso de nuevas instalaciones). En otros casos apague el calentador y contacte al Servicio Autorizado Lorenzetti